miércoles, 7 de mayo de 2008

El que pregunta es la pregunta

UG: ¿Por qué me hacéis estas inútiles preguntas?: "¿Existe un Dios? ¿Cual es el significado de la vida? ¿Se vuelve a nacer? ¿Que nos sucederá cuando muramos?" ¿Por qué os atormentáis con esas interminables preguntas?
En cuanto a mí, no tengo preguntas excepto las que se refieren a los asuntos del día a día: ¿Cuál es el camino hacia la cueva de Sr. Brahmachari? ¿Cuando sale éste o aquel avión?" Aparte de estas preguntas no se me ocurren otras. Muchos grandes maestros ha contestado tus preguntas durante siglos. ¿Por qué no estais satisfechos con ellas? Creéis que soy un Brahmajnani y un Jivanmukta y queréis saber si lo que he visto confirma vuestras creencias. De hecho, todas estas peguntas son preguntas de otros y no vuestras preguntas; si hubiera una pregunta que pudieras llamar tuya, no te dejaría descansar ni por un minuto. No existe pregunta parte del que pregunta. Los dos son lo mismo. Si la pregunta desaparece, el que pregunta desaparece con ella. Debido a que no quieres terminar contigo, te agarras para siempre a tus preguntas. por eso no puedes dejar de preguntar, incluso aunque sepas que no existe una respuesta.

UG: ¿Existe tal cosa como la iluminación? Por lo que a mi respecta sólo existen los procesos corporales. Ése es el Estado Natural. Tu existencia es un estado fisiológico, no una transformación psicológica. Ella (la iluminación) no es el estado mental de estar inconsciente un día y consciente al día siguiente. Si este Estado Natural algún día sucede, hará explotar cada célula, cada nervio y cada glándula. Es un cambio químico, una extraña alquimia dentro del cuerpo. Hasta que este cambio irreversible suceda, el cuerpo no podrá liberase del extrangulamiento al que le somenten los pensamientos. No puedes imaginar cuán profundamente los pensamientos penetran en cada célula del cuerpo.